El verano es una época especial donde casi todos aunque no nos vayamos de vacaciones hacemos un punto y aparte de la rutina diaria y en general disfrutamos mucho más de los espacios al aire libre.
Nada mejor que la naturaleza para recargarnos de energía y conectar con la serenidad interior que poco a poco a lo largo del invierno vamos perdiendo.
Es frecuente que se nos olvide que el verano es un momento donde podemos aprovechar para conectar con la calma a través del contacto con la naturaleza y con pequeños ejercicios que nos ayudan en este objetivo.
Así que estés donde estés este verano, acércate a la naturaleza y durante algunos minutos realiza este pequeño ejercicio de atención:
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Atiende a la entrada y salida del aire a través de tus fosas nasales.
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Atiende a los sonidos de la naturaleza: las olas del mar, el sonido del agua, el canto de los pájaros o incluso el murmullo de personas que están próximos a ti durante ese instante de observación.
Aunque tan solo sea durante 3 minutos que realices este ejercicio verás el efecto que produce en tu ánimo.
Este ejercicio de atención intencionada y sin juicios es lo que se denomina "Mindfulness" y los beneficios para la salud emocional y física son muchísimos.
Hoy hablamos de ésto en la entrevista de radio que me hizo Maite Garrido para EsRadio Galicia y que podéis escuchar a través de este enlace.