Respiración y relajación son tu ansiolítico natural y te cuento cómo actúan.
Cada vez más vivimos a un ritmo trepidante, no solo a nivel laboral, sino que nos exige estar siempre en guardia, llenos de estímulos tecnológicos (móvil, redes sociales, etc), de horarios sobrecargados de tareas y todo lo que tu ya puedes estar viviendo.
La consecuencia de la conexión permanente supone un problema para centrar la atención en lo que estamos haciendo, y a nivel fisiológico lleva a nuestro sistema nervioso a estar constantemente en un estado de alerta.
Cuando se mantiene esta tensión a lo largo del tiempo, acaba haciéndose crónica y empiezan a aparecer diferentes trastornos físicos.
Uno de los más frecuentes es la mala calidad del descanso, que puede ser por falta de hora de sueño o porque aunque dormimos, no conseguimos descansar ya que el sueño está lleno de despertares, o de pesadillas.
Ante esta situación es frecuente buscar alivio para ese cansancio constante que se instala en el cuerpo, o para conseguir conciliar un sueño reparador.
Existen distintas opciones y entre ellas, quiero hablarte hoy de lo que la respiración y la relajación pueden hacer por ti.
Empezaré por hablar un poco de lo que la respiración completa y con un ritmo regular puede generar en tu cuerpo.
Cuando estás nerviosa/o, acelerado, estresado es frecuente que el ritmo respiratorio que se establece en tu cuerpo es también un ritmo acelerado.
Este ritmo acelerado, a su vez produce una mayor activación del sistema nervioso simpático y se convierte en un círculo vicioso.
Cuando de forma consciente estableces un ritmo suave en tu respiración y moviento el abdomen con una respiración diafragmática, el resultado es el contrario.
Pulmones y diafragma
Con la respiración abdominal consigues que el estado de tu sistema nervioso cambie a un estado parasimpático y se produzca una respuesta de relajación a nivel físico y también a nivel mental.
Como he dicho la respiración lenta produce un efecto calmante de forma natural, y tu cuerpo tendrá si la práctica es adecuada un notable efecto de relajación.
Además de aprovechar el efecto de relajación que produce tu respiración, puedes aumentar el efecto con la práctica de diferentes técnicas de relajación.
La relajación se realiza a través de distintas técnicas.
La Respuesta de Relajación: son un conjunto de reacciones fisiológicas automáticas que son completamente opuestas a las originadas en la respuesta de estrés
Las técnicas de relajación más frecuentes son:
- Relajación autógena
- Relajación progresiva
- Relajación yóguica.
Por supuesto que existen muchas otras técnicas así que si te interesa el tema, solo tienes que consultarme o buscar más información.
El Dr. Smith identificó 10 estados psicológicos básicos asociados a la relajación, y los principales efectos que producían:
- Disminución de la tasa cardiaca y respiratoria,
- Reducción de la presión arterial,
- Disminución de la tensión muscular,
- A su vez, esta disminución de la activación fisiológica conduce a un estado de menor activación cognitiva
- Disminución de los pensamientos ansiógenos y emocional (ausencia de síntomas de estrés).
Comparto aquí una práctica guiada de relajación Autógena para que puedas tener la experiencia directa de la práctica y sentir sus beneficios.