En todos los cursos que he impartido sobre Técnicas de Relajación y en las sesiones privadas, la mayor dificultad con la que se encuentran mis alumnas/os no es otra que la falta de auto disciplina para dedicarse 10 minutos al día a su práctica.
El otro día leyendo un libro del Dr. Casas Hilari («Relájate y disfruta de la vida»), me encontré una frase que me causó gracia y me impactó porque no son solo mis alumnas las que tienen este problema y la trascribo aquí para que podáis reflexionar sobre ella:
Al Dr. Pelletier (Psicólogo y especialista en Técnicas de reducción de estrés) le preguntaron acerca de la dificultad para tratar problemas de estrés con sus pacientes y él respondía:
«Si yo fuera un excelente instructor piano y alguien viniera a mí para aprender tan difícil arte, les puedo segurar que dicha persona tendría un maravilloso piano en su casa y alrededor de unas tres horas para poder ensayar cada tarde. En el estrés nos gustaría que ocurriera algo similar; sin embargo, las personas que se acercan a los profesionales del estrés esperando un milagro y con poca predisposición para trabajar duro». Ya lo ven en gran medida, mejorar el afrontamiento del estrés es una habilidad que puede aprenderse, al igual que la música.